¿Qué es torre inclinada de pisa?

La Torre Inclinada de Pisa, también conocida como Torre de Pisa, es uno de los monumentos más famosos de Italia y una de las atracciones turísticas más visitadas del país. Se encuentra en la ciudad de Pisa, en la región de Toscana, y forma parte de un conjunto arquitectónico conocido como la Plaza de los Milagros, que también incluye la Catedral de Pisa y el Baptisterio.

La construcción de la torre comenzó en 1173 y se extendió durante varios años debido a una serie de interrupciones causadas por la inestabilidad del suelo y los conflictos militares. La inclinación de la torre se hizo evidente desde el principio, debido a un asentamiento inmediato del suelo en el que se construyó. La torre fue diseñada para ser vertical, pero comenzó a inclinarse hacia el lado sur durante su construcción.

La torre tiene una altura de aproximadamente 55 metros y está compuesta por ocho niveles con columnas y arcos de estilo románico. A medida que la torre se inclinaba, los constructores intentaron corregir la inclinación haciendo la parte superior más alta en el lado norte y reduciendo el número de columnas en el lado sur. Sin embargo, estos intentos solo lograron que la torre se inclinara más.

Durante muchos años, hubo preocupaciones sobre la estabilidad de la torre y se realizaron numerosos intentos para evitar que se derrumbara. En 1990, la torre fue cerrada al público debido a su peligro inminente de derrumbe. Se llevó a cabo un proceso de restauración de la torre que duró más de una década y se logró estabilizarla, reduciendo la inclinación de la torre.

Hoy en día, la Torre Inclinada de Pisa es un importante símbolo de Italia y atrae a millones de visitantes cada año. Se permite a los turistas subir a la torre y disfrutar de una vista panorámica de Pisa desde la parte superior. Además, se han llevado a cabo medidas de seguridad para garantizar la estabilidad de la estructura.

En resumen, la Torre Inclinada de Pisa es un monumento icónico conocido por su inclinación única. A pesar de los esfuerzos para corregir su inclinación, se ha convertido en una atracción turística popular y un símbolo de la ciudad de Pisa.